Síndrome de comprensión radicular por hernias de disco intervertebral lumbar

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Augusto Bonilla

Resumen

Refiriéndose a las complicaciones, varios principios básicos deben ser guardados para reducir los riesgos de ellas; la exposición debe ser adecuada. Una inadecuada visión del campo operatorio a causa de falta de una apropiada iluminación o falta de exposición es responsable de muchas complicaciones. La visualización puede ser obscura y producida también por la hemorragia no controlada, particularmente de las venas extradulares del canal espinal. Injurias de las raíces nerviosas no están relajadas adecuadamente por la posición inconveniente del paciente en mesa de operaciones. Usamos siempre el arco de Benett., consecuentemente lo hacemos en decúbito ventral. 


Los pacientes que han padecido de cirugía discal, están sujetos al mismo riesgo anestésico que acompaña a cualquier procedimiento quirúrgico.


Sin embargo, el 95% de nuestros casos ha sido intervenido con anestesia peridural, que es la que prefieren nuestros anestesistas. Los riesgos anestésicos deberán ser evaluados particularmente en relación con oclusiones coronarias, recientes, infartos miocárdicos y arritmias, con o sin falla congestiva cardíaca.


La reeducación por la gimnasia está destinada a dar a la columna una estática y una musculatura normales, pero ella no debe ser comenzada muy temprana. Nosotros la prescribimos al final del segundo mes de la operación. Una gimnasia muy precoz a menudo hace reaparecer el dolor. Se debe esperar que la cicatrización muscular sea completa. Todos los esfuerzos de la visagra lumbosacra deben ser evitados en este primer período, no se deben levantar cargas pesadas, no se debe empujar o tirar de un objeto; y sobre todo la mala posición de la columna o si el movimiento exige una torsión del cuerpo. Debe aconsejarse dormir sobre la espalda, llevar la cabeza baja, no llevar los talones muy alto y aconsejamos siempre que no debe retornar muy pronto a la conducción de un vehículo, y al hacerlo, proveyéndose de un espaldar adaptado especialmente al equilibrio de la columna.   


En ocasiones esta precauciones conducen a aconsejar muchas veces un cambio de orientación profesional o de actividad de trabajo. Hacia la octava semana el enfermo es llamado al Servicio de Rehabilitación, previa a una conservación y a la cooperación entre el enfermo y el quinecioterapista, que debe variar los ejercicios, adaptarlos a cada caso en particular, subrayar los progresos de los pacientes de semana a semana. Es decir que la experiencia y el rol psicológico del reeducador encuentran un lugar importantísimo en la conducción y en la continuación del tratamiento de los enfermos operados de disco. 


Creemos que esta reeducación algo retardada, que no ha dado magníficos resultados, es la mejor prevención de las lumbalgias residuales, y la mejor forma de prevenir las recidivas

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Cómo citar
1.
Bonilla A. Síndrome de comprensión radicular por hernias de disco intervertebral lumbar. REMCB [Internet]. 7 de agosto de 2017 [citado 19 de abril de 2024];15(6):371-82. Disponible en: https://remcb-puce.edu.ec/remcb/article/view/141
Sección
Artículos Científicos