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años de estudio. Drosophila melanogaster conocida como la “mosca del vinagre” es el modelo
animal que marcó áreas de la biología evolutiva contemporánea descrita en el año 1830 por
Johann Wilhelm Meigen: su muy breve descripción de la especie fue traducida como: “Cabeza,
tórax y patas amarillas; vientre negro, halterios blancos, alas incoloras.” (Keller 2007), esta mosca fue
escogida como el modelo experimental ideal para el estudio genético y molecular de una gran
variedad de procesos biológicos, por su fácil manejo, un genoma con pocas secuencias repetidas,
4 pares de cromosomas, bajo costo de mantenimiento y un ciclo de vida rápido si se compara
con otros organismos pluricelulares usados en investigación. Se determinó que, Drosophila
melanogaster en la etapa larvaria presenta estructuras que darán origen a las patas o tienen
capacidad regenerativa, pero en la etapa adulta, las patas ya no pueden regenerar (Uribe 2019).
En 1974 Richard Lewontin, utilizó “moscas del vinagre” con el objeto de determinar la variabilidad
genética presente en diferentes poblaciones, para ello utilizó una técnica de separación de
proteínas a partir de su tamaño y carga eléctrica, (electroforesis de enzimas), demostró que hay
más variación genética de lo que teóricamente se podría esperar (González-Astorga, 2021).
La primera mutación homeótica en Drosophila fue descrita por Bridges a principios del siglo
pasado, Thomas Morgan encontró mutaciones en la parte anterior del tercer segmento torácico,
que había sido reemplazada por la parte anterior del segundo segmento toráxico. Así también
Lewis, a nales del año 70 encontró el gen responsable del fenotipo bithorax, a partir de lo cual
se aislaron proteínas con el homeodominio en su estructura, algunas de las cuales se encuentran
relacionadas con mutaciones en los genes homeóticos (Perera et al. 2006).
Por otra parte, el grupo de Hogness en Stanford marcó la nueva era en la Biología al lograr la
clonación del primer gen homeótico, el gen Ultrabithorax, posteriormente se clonaron otros
genes homeóticos como Antennapedia, abdominal-A, abdominal-B y posteriormente el resto,
logrando identicar la naturaleza de los productos génicos de los genes HOX (Morata 2001). En
el 2016, se logró determinar que los genes y proteínas de Drosophila melanogaster comparten
homología con genes y proteínas de los vertebrados, lo que permitió a la biología del desarrollo
identicar procesos que se desarrollan en la mosca, y que están conservados en el desarrollo
de organismos superiores, permitiendo el estudio de genes involucrados en enfermedades
humanas (Betti 2016).
Complementariamente, las bases de datos de información genómica, revelaron que la mosca
Drosophila y el ser humano comparten más del 60% de los genes, y de este porcentaje un
75% causan enfermedades en los humanos, adicionalmente poseen más del 90% de genes
relacionados con la génesis del cáncer en los seres humanos (Yamamoto et al. 2014).
Genes Hox
Los genes HOX forman parte de la familia de genes homeobox, que poseen una secuencia de
180 pb llamada caja homeótica; esta secuencia fue descubierta y descrita por primera vez en
el genoma de Drosophila melanogaster, a partir de ello también se identicó en organismos
pluricelulares, como plantas, hongos, esponjas, al igual que en los vertebrados, incluido el ser
humano (Verena 2017). Las secuencias homeobox descubiertas y posteriormente analizadas
fueron muy parecidas a las de Drosophila, determinándose que el “homeobox” codica una
secuencia de 60-aminoácidos de largo, segmento polipeptídico que fue denominado como
“homeodominio” (Figura 1) (Gehring et al. 1994).
Los genes HOX son pequeños, están formados de dos exones separados por un intrón, tienen
una longitud genómica de 5-10 kb en comparación con la media para genes codicadores de
proteínas de 27 kb; el exón está localizado cerca del extremo 3’ y contiene el homeobox de
180 pb que codica el homeodominio de la proteína HOX. Estas proteínas homeobox actuarían
como factores de transcripción especícos con el homeodominio como motivo de unión al
ADN (Grier et al. 2005). El homeodominio posee un motivo de unión al ADN de tipo hélice-
giro-hélice, además la mayor parte de las proteínas HOX, contienen una secuencia de seis
aminoácidos cerca del homeodominio, que funciona como sitio de unión para cofactores que
incluyen proteínas TALE como PBX y MEIS. Sin embargo, algunas proteínas HOX carecen de este
hexapéptido (Erselius et al. 1990).
REMCB 44(2): pag 33-45, 2023